Si no puedes soportar la idea de que la gente haga cosas traviesas con su bitcoin, deberías volver corriendo a la tierra fiduciaria, donde los banqueros y los políticos te prometerán un espacio seguro.
Simplemente no esperes ninguna simpatía de nuestra parte cuando inevitablemente terminas de manera predecible.
Un patrón bien establecido en la gobernanza de Bitcoin:
1. Un grupo propone un cambio polémico.
2. La propuesta no logra obtener un consenso aproximado.
3. Un grupo marginal reúne a la gente en las redes sociales.
4. Se difunden conspiraciones sobre Bitcoin Core.
5. La frustración del grupo marginal alcanza su punto máximo y se desvanecen.