Este mundo se volverá cada vez más exigente con la confianza; la astucia puede traer beneficios a corto plazo, pero con el tiempo, aquellos que carecen de crédito y espíritu de contrato eventualmente serán excluidos. En el pasado, cuando el mercado aún no estaba completamente abierto, quien podía acumular recursos primero podía ocupar una ventaja. En ese entonces, el modo de operar era más parecido al de un comerciante ambulante, yendo a donde había oportunidades, y moviéndose después de cerrar un trato. Pero ahora, el mercado está madurando gradualmente, y todos buscan un desarrollo estable a largo plazo; el modelo de negocio se ha convertido en uno más sedentario, manteniendo la competitividad duradera a través de la reputación.