La voz de Anas Al-Sharif no será silenciada. Su mensaje y sus palabras se compartirán desde Gaza con el mundo. A partir de hoy, sus plataformas serán la voz de cada niño hambriento, cada madre afligida y cada padre paciente y luchador, la voz de Gaza que resiste el exterminio, la injusticia y la traición. Antes de su muerte, Anas nos confió una gran misión y una gran responsabilidad: mantener la cobertura continua. Continuaremos de acuerdo con sus deseos mientras vivamos. Si desea apoyar a Gaza, apoye a Anas, que fue la voz de Gaza y la voz del campo de refugiados de Jabalia. Vivió y murió por Palestina, manteniéndose firme contra la embestida de los cohetes con determinación y dedicación a la verdad inquebrantable y a informar sobre las luchas y el sufrimiento de su pueblo. Te invitamos a seguir los relatos de Anas y compartirlos para mantener viva su voz. Anas está vivo. Su voz perdura, y la cobertura continúa.