mi quizás la historia más genial de todas es que Lewis Hamilton (el mejor piloto de F1) una vez se acercó a mí y se inclinó. le gustó mi baile y mi vibra en general. realmente es un buen tipo, por cierto. hay un puñado de cosas que me mantienen perpetuamente y de manera inquebrantable positivo sobre la vida y esta es una de ellas.

normalmente no me deshago en halagos hacia celebridades o hacia nadie en general, pero este tipo es genuinamente uno de los mayores talentos (¡y hombres!) que jamás haya existido. Tomé eso como una señal bastante fuerte.