En los últimos 2 ciclos, las acciones chinas y Bitcoin tienden a alcanzar sus máximos juntos. Ahora, el CSI 300 parece estar sumándose a la acción, gracias a un déficit presupuestario del 6% y estímulos monetarios (no tan grandes como los paquetes de COVID o GFC, pero aún son bastante considerables, especialmente en comparación con los países del G7 excluyendo a EE. UU.). La forma en que las acciones están superando su rendimiento sugiere que aún hay más liquidez en camino y más espacio para que este ciclo continúe.