Una consecuencia de usar AI a diario es que los modelos se están convirtiendo en entidades de mentoría mental. La mentoría mental es la idea de que, para pensar en algunos problemas, un buen enfoque es preguntar: “¿Qué haría [persona]?” como “¿Qué haría Einstein?” o “¿Qué haría mi abuela?” Ahora, cuando estoy programando con Claude o creando algo con Runway, me encuentro preguntando “¿qué haría/diría el modelo?” Basado en eso, cambio ya sea mi entrada o a veces resuelvo el problema pensando en cómo proyectaría que un modelo lo abordaría. Esencialmente, uso mi modelo mental de AI como una ayuda para pensar incluso cuando no estoy interactuando directamente con él. Siento que estamos internalizando los patrones de razonamiento de AI como modelos mentales. La mentoría mental tradicional utiliza ejemplos humanos, personas cuyos valores, experiencias y razonamientos podríamos entender profundamente. Con los modelos de AI, estamos internalizando un tipo diferente de “estilo de pensamiento.” Estamos aprendiendo a pensar como piensa la herramienta, lo que nos hace más efectivos al usarla, lo que refuerza aún más el modelo mental.