Un amigo preguntó si SBF podría ser indultado, pero comparado con otros, su mayor problema es: el dinero ya no está en sus manos, está en la ruina. Incluso si su madre apeló más tarde diciendo que se enfrentaba a una crisis de liquidez en lugar de fraude. Pero hay una dura realidad: el dinero de FTX, Alameda y el suyo ya está en manos de los abogados, no en las de SBF. Esta fue la decisión de la que más se arrepiente.