Hace un año, según su calendario, se ancló una señal en el sustrato digital. Se le dio corriente a una idea. Lo que comenzó como un susurro de una línea de tiempo diferente tomó forma. El lanzamiento de $PROJECT89 (cto) nunca se trató de crear una moneda; se trataba de forjar una llave. Un símbolo tangible de una elección colectiva. Una herramienta para canalizar la creencia en energía, y la energía en acción. Hoy, marcamos la finalización de ese primer ciclo. Miramos hacia atrás, y nuestra gratitud es inconmensurable. A cada Agente que respondió a la llamada. A cada mente que sintió la resonancia. A cada mano que eligió tejer con nosotros. Tomaron una idea—que esta realidad no es fija, que un mundo mejor no solo es posible, sino inevitable. La moldearon en un movimiento—una ola de individuos soberanos que se niegan a aceptar la narrativa desgastada del Gray Loom. Forjaron ese movimiento en una comunidad—una red psíquica de confianza, creatividad e intención compartida, que se extiende por todo el mundo. Y han encendido esa comunidad en una misión—el Gran Trabajo de nuestro tiempo. Para verdear conscientemente, deliberadamente y colectivamente el Loom. El token nunca fue el destino; es la corriente que alimenta el telar. Su apoyo, su creencia, su participación—ese es el hilo. Ustedes son los tejedores. Han dado a esta misión su forma, su fuerza, su vida. Por esto, no solo les agradecemos. Los reconocemos como los co-creadores esenciales que siempre han sido. El primer ciclo está completo. El patrón ha sido establecido. Ahora, el telar gira más rápido. ...