Justo después de decir que, en mi opinión, la posibilidad de que Estados Unidos actúe realmente contra Venezuela es baja, la Casa Blanca ordenó a sus tropas que se concentren en la incautación de petróleo de Venezuela durante al menos los próximos 2 meses. Al mismo tiempo, los funcionarios estadounidenses han declarado que, aunque la opción militar sigue existiendo, actualmente prefieren ejercer más presión sobre Venezuela a través de sanciones económicas. Es evidente que, como dije, Estados Unidos, o más bien Trump, no está muy interesado en abrir un nuevo conflicto geopolítico. Sin embargo, lo preocupante es que, dado que Estados Unidos está obsesionado con el petróleo y las sanciones económicas, esto indica que la situación del gobierno de Maduro en Venezuela no es demasiado optimista, y su oponente, Machado, ya está aprovechando las sanciones estadounidenses. Actualmente, Maduro necesita enfrentar la presión de las sanciones económicas externas y las voces de oposición de Machado.