Los hombres deben recordar que, cuando no obtienen el respeto de su esposa, no deben comunicarse, ni intercambiar palabras, y mucho menos enojarse o sentirse tristes. Lo que necesitas hacer es ignorar y mantener distancia. En este mundo, no importa cuánto bien hagas a alguien, eso no garantiza que esa persona te trate bien, incluso en el matrimonio es así. No te busques problemas tratando de cambiarla, porque no podrás. Cuando una mujer no se da cuenta de que está equivocada, intentar decírselo no solo es inútil, sino que también aumentará la frustración tanto para ti como para ella. Debes entender que lo que realmente puede hacer que una mujer cambie nunca es la comunicación o la razón, sino chocar contra la pared, tomar caminos equivocados y caer. Déjala hacer lo que quiera, algún día ella pagará por sus acciones.