Escuchará mucho el próximo año sobre la reestructuración de las universidades y la reducción de personal o el cierre de muchas carreras o programas de doctorado, y si bien es comprensible que muchas personas asuman que esto es una respuesta a Trump o a la presión "antiwoke", debe tener en cuenta que acabamos de llegar al pico de la escuela secundaria y ha habido una disminución a largo plazo en muchas carreras que alguna vez fueron populares como inglés e historia. Estos dos hechos serían un impulsor significativo de la reestructuración incluso si Kamala Harris hubiera ganado y estuviéramos a la mitad del primer año de la Administración Joy.