Abres X ... y publicas tu arte: 500 visitas. Publicas una historia sobre ti: 50 visitas. Publicas una diatriba aleatoria sobre cómo nadie ve tu arte: 5k visitas. Casi parece que lo único que todavía nos conecta es sentirnos desconectados. Desplazados. Fuera de sincronía. Como si ya nadie estuviera escuchando realmente. Pero no es por eso que comenzamos a aparecer aquí. Vinimos por el arte. Para las conexiones. Encontrar audiencias, encontrar amigos, hacer que nuestro trabajo se vea y construir un futuro en el que los creadores puedan prosperar. No podemos cambiar el algoritmo. No podemos cambiar los períodos de atención cortos o el ruido interminable. Pero podemos cambiar la forma en que nos presentamos. Podemos elegir volver a comprometernos con la intención, volver a publicar el arte que amamos en lugar de pasar por alto, comentar la nueva pieza de un amigo en lugar de la publicación de otro influencer, escribir sobre arte incluso si nadie está mirando. Así es como devolvemos el significado. Una pequeña acción consciente a la vez. Sigue apareciendo por las razones correctas. Lo tienes. Te cubriré las espaldas 🤝