una de las mayores ideas erróneas que tienen las personas mayores sobre el estereotipo del jugador de degen es que la mayoría de estas personas solo intentan alcanzar lo que solía ser hitos normales de clase media hay una especie de moneda de dos caras donde un lado (el generoso) dice que en realidad es una negativa desafiante a resignarse a una vida en la que nunca poseerás una casa, no podrás permitirte tener hijos o jubilarte el lado más cínico de la moneda es que la tecnología y una existencia terminalmente en línea han frito tanto los cerebros que incluso aquellos que ganan inevitablemente lo devolverán porque se trata de la adrenalina, no de un medio para un fin.