Siempre habrá una audiencia para la tecnología de privacidad que es extrema; es valiosa, y la audiencia para la que está diseñada la valora como tal. Esa es la tecnología de privacidad que aborda la batalla desde la perspectiva de un ataque frontal total. Dice: "esto es lo que somos, esto es lo que creemos y esto es lo que vamos a hacer al respecto." Luego está la tecnología de privacidad que utiliza el método del "caballo de Troya", que significa que se adapta a las convenciones del día y llega a las manos de la persona común—el tipo de persona que no está impulsada por alguna misión ideológica abrumadora que la lleve a los rincones más lejanos de la tecnología para encontrar la herramienta que avance su misión—y luego reescribe el camino para la sociedad una vez que se normaliza, es adoptada por el público y ha desarrollado una fuerte base desde dentro de los muros del castillo. Ningún método es correcto ni incorrecto; simplemente son diferentes enfoques para lograr el mismo objetivo. Si prestas atención al panorama de la privacidad ahora, verás quién está empleando qué enfoque. Que todos ellos ganen, de diferentes maneras y por diferentes razones.